domingo, 8 de diciembre de 2013

La vigilante


Ruty en el jardín
Los olores del prado


No sé si a vosotros os pasa lo mismo, a mi me sucede con frecuencia 
que las tareas menos gratas y que mas terror me provocan, una vez
salvados esos miedos pasan a ser mis actividades  favoritas.
En el exterior de nuestra casa se encuentra un pequeño jardín 
dividido en dos zonas, la mas cercana a la casa, con una superficie 
mas llana y menos complicada la utilizamos para nuestras carreras, 
juegos y otras labores de supervisión y vigilancia.
La otra zona , mas frondosa y con un desnivel muy pronunciado
es la que a mi me impone un mayor respeto.




Durante largos meses solo me he atrevido a realizar mis exploraciones
por la noche, cuando todas las luces se apagaban y sobre todo 
si ya no se oían ruidos de ningún tipo afuera, era el momento en que
 reunía fuerzas y me lanzaba a investigar, eso si, con mucha precaución
pues al hecho de encontrarme bastante alejada de la puerta de casa
hay que sumarle que Yako no siempre se muestra dispuesto a acompañarme
argumentando que si el ya está muy mayor, que si ya le toca la jubilación,
que si las nuevas generaciones somos las que tenemos que hacernos
cargo de estas tareas ...en fin, un rollo.


Explorando nuevas sendas
Explorando


Hoy en día lo complicado es sacarme de aquí, me hago la remolona
a todas horas y aunque sigo prefiriendo explorar en compañía
ya no me importa pasarme los ratos libres vigilando y ladrándole
a todo el que se acerca.
El truco está en erizar todo el pelo del lomo para parecer mas alta
al tiempo que adopto esa postura de chulita indomable que a mi
tanto me gusta, y por si la cosa se complica, empiezo a llamar a
Yako para que se presente inmediatamente.
En esto si que nunca me falla.


Probando el sabor de la hierba
Rica hierba


Mantengo mis dominios libres de fauna, tanto animal como humana
tan solo tengo en consideración a una pequeña ardilla porque me 
han asegurado que ya vivía aquí antes de que yo llegase.
Soy muy, muy ágil y aunque veo que no les hace mucha gracia 
no hay nada tan emocionante para mi como una buena persecución
de gato, o de lo que sea, a través de mi finca.


Ladrando
Hasta luego!!

martes, 5 de noviembre de 2013

Ruty in the beach



Ruty en la playa
En la playa


Muchas y variadas leyendas corrían entre los habitantes del refugio
sobre como era la playa, algunos presumían de haberla pisado y 
otros trataban de explicarme con sus mejores intenciones las maravillas
 que me iba a encontrar allí.
Ahora que ya la he visto con mis propios ojos os puedo decir que
no es exactamente como yo me la habia imaginado.


Ruty sonriendo
Feliz


La playa no es como el bosque y no quiero decir con esto que no
me gustase, que el impacto fue tremendo, ojiplática me quedé  ante
tal extensión de arena y agua, me hacía sentir muy pequeñita.
El mar y esos sonidos rítmicos provocados por las olas consiguieron
hipnotizarme, me sentaría durante horas a escuchar embobada 
como rompe el agua contra las rocas.
Un tema que me llena de inquietud en este entorno es la ausencia de 
escondites en los que poder refugiarme en caso de peligro, sabéis 
que para eso soy yo muy previsora y los peligros, los muy canallas
andan siempre por ahí acechando a las perritas.
Lo dicho que no crece ni un triste matojo en toda esta inmensidad
Yako los echa de menos a la hora de dejar sus habituales marcas
y yo tambien agradecería algun arbustito tas el que hacer un pis 
con un poco de discreción , en fin... esperaré a llegar a casa.


Paseando por la arena
Que es eso?



Nos resulta muy agradable caminar sobre la arena, es muy blandita y
se adapta a la forma de nuestras patas, todos los fines de semana 
nos reunimos aquí un montón de perros con sus respectivos
acompañantes y no es raro ver como alguno de los nuestros se
anima a  un chapuzón, yo encuentro el agua demasiado fría
y por lo que me cuentan cuando llegue el verano y mejoren la
 temperatura nosotros ya no podremos venir a pasear .


La playa agota
Demasiadas emociones


Tengo entendido que playas hay muchas aunque a mi me parezca
siempre la misma, lo básico es muy parecido en todas las que estoy 
visitando, por un lado está la arena, insípida al gusto y oler, lo que 
se dice oler, no huele a nada conocido, complicado encontrar un
rastro y mas aun el seguirlo, por el contrario el mar trae aromas a sal
 y a mejillones al vapor...



jueves, 22 de agosto de 2013

Parque forestal




Ruty observando la naturaleza
Ruty


De los lugares que solemos frecuentar en nuestros paseos
creo que el parque forestal es con diferencia el más interesante 
de todos, se trata de un bosque por el que hay que caminar 
despacio y muy atentos, concentrados en no perderse entre la
cantidad de aromas y sensaciones que la asaltan a una desde 
que entra en sus dominios.




Nosotros lo consideramos "nuestro bosque" porque ya nos 
conocemos hasta el ultimo de sus rincones, hemos recorrido
todas sus sendas y observado sus constantes cambios hasta
que los sofocos del verano y la ingente cantidad de insectos que
acompañan a los caballos que aquí viven nos han obligado a
 espaciar nuestras visitas en espera de mejores condiciones.


Ruty sentada en el camino
Un alto en el camino


Nunca pensé que lo echaría tanto de menos, con lo poco que
me gustaban a mi los viajes en coche y lo mal que le sentaban
a mi aparato digestivo, ahora soy la primera en apuntarme a 
lo que sea, siempre presta a subir de un salto a la furgo y 
lanzarme a la conquista de nuevos horizontes.
( Para mi casi todos los horizontes son nuevos, se ve que 
estoy "poco viajada" ) 


Paseando por el bosque
Paseando por el bosque


Si pudieseis observarme durante mis recorridos os daría la 
impresión de que voy como muy centrada, pensando en mis 
cosas, lo cierto es que detecto infinidad de olores y rastros que
me obligan a permanecer con la trufa pegada al suelo todo el
trayecto.
Yako por su parte me ha enseñado cuales son las mejores piedras
para olfatear en busca de mensajes así como toditos los matorrales 
en los que debemos intentar adentrarnos aunque sepamos que
no nos lo van a permitir.


Ruty descansando tras el paseo
Agotada


También debería confesar que otro de los grandes placeres que
me provocan las subidas al parque forestal estaría en regresar 
agotada a mi casa y poder tirarme en cualquier esquina
sintiéndome una podenca feliz

miércoles, 17 de julio de 2013

Primeros paseos



Nuestro bosque
Sueltos por el bosque


Es tremendo las caminatas que se pegan estos tres, yo estaba
convencida de estar en  un estado de forma envidiable, con este 
tipo que tengo y la agilidad de la que hago gala a todas horas,
pues va a ser que de fondo no estoy muy allá, acabo todos los
días arrastrando la lengua por los caminos y deseando llegar a la
furgoneta para que nos vayamos para casa.
Me comentan que me vienen muy bien estos paseos para adquirir
confianza en mi misma y para socializar, pero si os digo la verdad
a mí lo que me provocan es un cansancio inmenso y un hambre 
atroz, me como una ración casi tan grande como la de Yako y
aun así no he engordado ni un kilo.


Oliendo las hierba
Aprendiendo a buscar rastros


Lo de pasear estaría genial sino fuese por lo de la correa, no me 
agrada la sensación  de ir atada y no poder escaparme como un
relámpago ante un ruido extraño o una situación que se salga
de lo que yo considero normal.
Lo hice en una ocasión, lo de escapar, y se ve que entre el
susto que se llevaron y la extraordinaria tarea que resultó el
convencerme de que en estos casos lo mejor para mi era que
volviese a su lado y me dejase poner de nuevo el collar y la
correa, ahora han decidido cambiar los útiles de paseo por
otros mas seguros de los que no consigo escabullirme.



Paseando por el bosque
De paseo


Por lo que me cuenta Yako y lo que voy observando en los otros
perros he llegado a una conclusión, el truco de los paseos está  en
realizar constantes y largas paradas con el pretexto de olisquear
aquella piedra de allí o arañar un poco esa tierra de por allá.
Yo todavía no se, en concreto, que es lo que hay que buscar,
pero estoy segura de que en cuanto lo huela, lo voy a saber porque
yo soy así, muy de seguir rastros... me sale de dentro.
Con respecto a lo de escaparme os voy a contar una cosa,
se pasa muchísimo mas miedo sola que en compañía.



Yako descansando
Yako también se cansa




viernes, 5 de julio de 2013

Nuevas normas

Ruty y sus juguetes
Jugando con lo que encuentro


Yo ya sospechaba que las normas siempre van a ser las mismas
pero considero que cuando se llega a una casa nueva, una debe 
de experimentar y dejar suelta a esa aventurera que todas
llevamos dentro, el truco consiste en observar el semblante
que se les pone para saber si les ha gustado mucho o poco
y eso si, siempre poner cara de " yo no he sido ".


Destrozando mis juguetes
Me han pillado


Ruty y Yako en casa
Que buenos somos!!


A ver si alguien me lo puede explicar, cuando a la hora del
desayuno dejan sobre la mesa un bizcocho recién horneado
y a una perrita con el estomago vacío,¿que es lo que se esperan?
¿que les pinte una acuarela?¿y por qué me miran con esa cara?
si solo me he comido mi parte, la otra mitad, que supongo será
de Yako no la he tocado...
Ahora ya sé que lo está sobre la mesa no es para nosotros
por muy rico que huela.
Un caso aparte es lo de la correa, me lo pintan como si me
hubiesen comprado un regalo, ayyy que equivocados están,
un regalo tiene que parecerse mas a medio kilo de solomillo
o a un fin de semana en la montaña, una correa no es mas
que un incordio.
Correas ya me he comido tres, dos mías y una de mi compañero.
Yako me ayuda también con estos temas, trata de convencerme
de lo inútiles que son mis esfuerzos mordiéndolas y cortándolas
si luego no tengo pensado marcharme a ningún lado,si es que
en el fondo aquí no se está tan mal.


Ruty agotada,durmiendo
Estoy agotada...

Otro problema es lo mucho que me esta costando entender la sutil
diferencia que existe entre mis juguetes y lo que no es un juguete.
Uno de mis entretenimientos preferidos es destripar la colchoneta
de Yako pero he observado que cuando ya esta muy rota, la mía
pasa a ser de su propiedad mientras yo vuelvo a mi vieja manta.
En fin, trataré de sacar conclusiones, aunque no os prometo nada
que a mi esto de las conclusiones lo que mas me provoca es sueño.

                                                                               

lunes, 17 de junio de 2013

Nuevas amistades



Yako acostado
Yako

Creo que vamos a ser una manada de dos, con la ilusión que me
hacía a mí lo de ser perra única, es que vengo yo de muchos amigos
y mucho barullo, y ya veis con lo que me he encontrado.

Descansando
Descansando con Yako

Me gustaría que conocieseis a Yako, mi gran amigo, yo lo quiero 
con locura desde el primer día en el que quise poner las cosas
en su sitio y le lancé mis peores ataques, con rugidos,malas caras
y pelos de punta incluidos.
Nada, ni se inmuto, siguió oliéndome y dándome besitos como
si no se hubiese enterado.
Lo mismo me pasé un poco de violenta en estos primeros días,
pero estoy un poco harta de que se metan conmigo los perros grandes.
Ademas yo no soy pequeña, soy mediana y muy peligrosa...

Dos en cama
Mi guardaespaldas

Como os iba contando ,Yako tiene mucha paciencia, creo que ya es
mayor y no suele tener prisa para nada, sin embargo siempre tiene
un rato para jugar conmigo y os puedo asegurar que a veces soy 
incansable,me encanta jugar casi tanto como dormir o comer,
son mis tres actividades favoritas.
Adoro a este perro, cuando paseamos me resulta muy útil como 
guardaespaldas, detesto que se me acerquen tanto personas 
desconocidas como perros descarados y con Yako los paseos
son felices, sin preocupaciones, olisqueando aquí y allá 
sabiendo que nada nos va a molestar.


En la playa
Buena pareja

En las ocasiones en que no me siento segura, me arrimo mucho
a el y se me va pasando, me aporta mucha seguridad.
¿ No creéis que hacemos buena pareja ?

sábado, 8 de junio de 2013

La mudanza

Ruty preocupada
Esto no me gusta nada

La verdad es que no me traje muchas cosas, no estaba yo
preparada para este traslado, y aunque recuerdo que algo
distinto flotaba en el ambiente desde la noche anterior
supongo que una nunca se lo espera.
De mi antiguo hogar conservo un montón de buenos recuerdos,
la seguridad de haber sido una perrita muy querida
y por último un collar, no,  no es que me gusten los collares
al contrario,creo que es un accesorio del que se podría 
prescindir, pero este collar es un regalo muy especial y
os puedo asegurar que es una de las pocas cosas que no
he roto con los nervios de los primeros días.
No me fío ni un pelo de estos dos que me han subido en un 
coche y me sujetan con una correa cuando nos bajamos,
en cuanto tenga un oportunidad me como la correa y
me vuelvo para casa.


Ruty durmiendo
Durmiendo

He intentado por todos los medios mantenerme despierta y
alerta toda la noche, pero se ve que entre el ajetreo del dia,
el baño y la cena finalmente me ha vencido el sueño.
A pesar de que se muestran muy amables y cariñosos
yo sigo sin fiarme de Ellos.

Ruty analizando la situación
No me fío


martes, 4 de junio de 2013

Declaración de intenciones

Ruty meditando
Yo misma

Para empezar creo que debería presentarme, mi nombre es Ruty,
sí, ya sé, el nombre mas bonito del mundo, yo es que soy así.
El tener un nombre es uno de los momentos mas importantes 
en la vida de un perro como yo, con él llegan los cambios y la
posibilidad de encontrar un nuevo sendero para recorrer.
A lo que iba, mi intención a la hora de comenzar esta bitácora
es llevar un registro de todas las novedades que estoy 
soportando en esta fase de mi vida tan llena de agitación.
Mi memoria es escasa, y con esto espero recopilar el 
suficiente número de aventuras como para sorprender,
cuando nos volvamos a encontrar, a todos los grandes amigos
que ahora dejo atrás.
Al mismo tiempo confío en que mis reflexiones puedan llegar
de algún modo hasta aquellos que tanto me querían y sepan que 
yo no los he olvidado.



Ruty oliendo el cesped
Soñando margaritas